Son las dos grandes motos del mundo. Las superbikes, y los prototipos de MotoGP. Siempre nos hemos preguntado qué diferencias hay y dónde encuentra la ventaja la MotoGP. Pues bien, Suzuki nos intenta sacar de dudas con un vídeo en el que su piloto probador, Sylvain Guintoli, compara en su canal de Youtube.
Guintoli se fue al circuito de Donington Park para ponerse a los mandos de la Suzuki GSX-1000R, la moto de Superbikes de la marca de Hamamatsu, y compararla con la Suzuki GSX-RR, la MotoGP que él está acostumbrado a desarrollar. Guintoli encuentra nueve campos en los que las diferencias entre una y otra se hacen palpables.
El chasis, el motor y los neumáticos, los tres puntos claves para Guintoli
Lógicamente, el primer apartado en el que Guintoli nota la diferencia es en el motor. Mientras que en la Suzuki GSX-R1000 hay 200 cv, el francés dice con sorna que "no me dejan decir cuántos hay en la MotoGP, pero os aseguro que bastantes más". Aún así, Guintoli explica que precisamente Donington no es el circuito donde más se nota, porque en la superbike no pasas de cuarta marcha.
"Un motor de MotoGP es interminable en cuarta, quinta y sexta, sigue y sigue empujando hasta 320 o 330 km/h, mientras que en esas marchas una moto de calle ya se va calmando", añade Guintoli. Sin embargo, insiste en que precisamente en Donington Park la diferencia no es tan grande, y que incluso nos llevaríamos una sorpresa.
Guintoli añade que "la moto de calle utiliza el mismo sistema de válvulas de distribución variable que la MotoGP. Esto permite tener una curva de par plana y llena desde muy bajas revoluciones. En pista esto te deja aprovechar el motor en marchas más altas mejorando la tracción, no tienes que cambiar tanto de marcha, el motor sale desde muy abajo. En pista, esto te da mucha tracción".
Pero incluso por encima del motor, Guintoli marca el chasis como gran diferencia entre una MotoGP y una superbike. Ambos son de aluminio, pero la diferencia está en la geometría. "En la MotoGP hay mucha más estabilidad delante en la frenada, la moto es más larga, tenemos un basculante trasero más largo que nos permite entregar más potencia sin que se levante tanto la rueda".
Guintoli además destaca lo bien que giraba la moto de calle en las curvas de Donington Park, "lo que demuestra que la moto de calle está diseñada para girar bien a baja velocidad, tal y como vas en carretera. Una moto de MotoGP es como un animal de carreras, es más larga, más rígida y dura", concluye.
Son los dos principales campos que aborda Guintoli, pero hay otros siete más que son más pequeños, pero todos juntos marcan una gran diferencia. Por ejemplo la diferencia entre los frenos de carbono de la MotoGP y los de acero de la moto de calle, que hace que las frenadas del prototipo sean mucho más bruscas.
Otro punto clave que marca Guintoli es la caja de cambios, que en la MotoGP "es seamless, este sistema hace que todo el cambio de marchas sea más suave. Creo que es un sistema que sólo es útil si tienes muchísima potencia", mientras que la superbike utiliza un cambio rápido y un blipper que se adapta mejor a su potencia.
CHRONO A DONINGTON PARK AVEC MA GSX-R1000R 💯d’ORIGINE ✊🏻😎
— Sylvain Guintoli 🇫🇷 (@SylvainGuintoli) April 21, 2020
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También son importantes los neumáticos. Los de la MotoGP están exclusivamente diseñados para ellos. Guintoli cree que "son la diferencia más grande. La Suzuki GSX-R 1000 lleva de serie los Bridgestone R11, es un buen neumático para el circuito, en carretera va bien aunque la temperatura sea fría. Siento mucha curiosidad por probar algún día unos neumáticos de MotoGP en una moto de calle para ver las diferencias. Te garantizo que sería grande".
Otra diferencia que nota Guintoli es la electrónica, ya que en MotoGP puedes adaptar las ayudas totalmente al piloto, el circuito o las condiciones, mientras que en la moto de calle solo vienen unos mapas predeterminados. El piloto probador de Suzuki explica que para circuito a él solo le va bien el mapa menos restrictivo de la moto de calle: "Te da bastante libertad. La rueda trasera puede patinar, y eso me gusta".
Las suspensiones son otro punto comprometido. Para Guintoli todo está bien con la parte delantera de la moto de calle, pero la trasera "es demasiado blanda comparada con la MotoGP, que es mucho más rígida". Lógicamente, el francés explica que en la moto de calle hay una apuesta por la comodidad que no existe en una MotoGP.
Por último, Guintoli se centra en dos aspectos más. El primero el peso, ya que la moto de calle es 40 kilos más pesadas que la MotoGP. Y el segundo la postura para el pilotaje. Guintoli explica que en una MotoGP hay mucho más espacio, los semimanillares están más abiertos y, sobre todo, no se carga el peso delante, lo que le da más libertad para pilotar.
Sylvain Guintoli, al borde de los 38 años, es desde 2017 piloto probador de Suzuki. Antes, ha tenido una dilatada carrera profesional en la que ha pasado por muchas motos diferentes. Ha pilotado para Yamaha y Ducati en MotoGP, para Aprilia y Honda en 250 cc y para Suzuki, Yamaha, Ducati, Honda y Aprilia en el mundial de Superbikes. Sabe de lo que habla.
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