Revolución rookie: cuatro novatos llegan a MotoGP 2019 para poner patas arriba el mundial
La generación de novatos de 2019 promete llenar de talento MotoGP. A lo largo de la historia ha habido grandes hornadas que han repleto de leyenda la máxima categoría del motociclismo, y la de esta temporada tiene fundamentos para tratar de unirse a ellas. Hablamos de cuatro jóvenes pilotos que llegan muy preparados, con campeonatos y subcampeonatos en la mochila y, sobre todo, con muchas ganas e ilusión de responder a la confianza puesta en ellos.
Nos referimos a Joan Mir, Miguel Oliveira, Pecco Bagnaia y Fabio Quartararo, los cuatro novatos del Mundial de MotoGP que, en mayor o menor medida, ya han dejado muy buenas sensaciones en los test de pretemporada de Malasia y Catar.
Joan Mir, un estreno con moto oficial
Posiblemente el que más presión sienta de los cuatro sea Joan Mir. El piloto balear debutará a los mandos de la Suzuki GSX-RR, una moto de fábrica y que ya se ha mostrado muy competitiva durante la pretemporada. A su lado, un Álex Rins que terminó tercero en los test de Catar y que ha demostrado un gran ritmo de carrera.
Pero Mir no es un piloto cualquiera. Campeón del mundo de Moto3 hace solo dos años, le bastó una temporada en Moto2, con cuatro podios, para seducir a Suzuki y ganarse un puesto en el equipo oficial. A sus 21 años, este aguerrido y talentoso piloto mallorquín garantiza un relevo de calidad para la actual generación de supercampeones españoles.
En Catar, pese a la sorprendente actuación de su compañero Rins, Joan Mir consiguió quedarse a tan solo cuatro décimas de su tiempo, algo que motivó al balear a mostrarse "muy contento de la Suzuki y con el test", además de a reconocer que "estoy mejor de lo que esperaba". A poco que mejore en vuelta rápida, Mir será un piloto muy correoso desde esta misma temporada.
Fabio Quartararo, el niño prodigio de Yamaha
Si tenemos que hablar de un piloto que haya sorprendido desde el principio ese es Fabio Quartararo. El francés debuta con el nuevo equipo Petronas Yamaha SRT y cerró la pretemporada con el segundo mejor tiempo de los test de Catar, a dos décimas del mejor registro de Maverick Viñales.
Quartararo fue el niño prodigio del motociclismo en 2013 y 2014, tras ganar dos FIM CEV Repsol siendo un completo desconocido. Con solo 15 años llegó a Moto3, obligando a crear la 'ley Quartararo' que permitía correr en el mundial a un menor de 16 años solo si ha ganado el ahora llamado Campeonato del Mundo Junior de Moto3.
Pese a que sus andaduras por Moto3 y Moto2 no han sido demasiado brillantes, solo una victoria y cuatro podios en cuatro años, Yamaha sigue confiando en su talento lo suficiente como para confiarle su nueva moto satélite, con la esperanza de que su estilo de pilotaje y complexión física se adapten mejor a las dimensiones y características de la MotoGP.
El propio Quartararo, que todavía tiene solo 19 años, explicaba tras los test de Catar que "tienes que ser agresivo y suave con la Yamaha. Eso viene naturalmente en mí, aunque cuando hice mis vueltas rápidas quizás fui un poco más agresivo y menos suave".
Pecco Bagnaia, a por el 'Rookie del año'
Si algún novato viene con más cartel y es más fiable ese es Peco Bagnaia, de 22 años. El pupilo de Valentino Rossi se proclamó campeón del mundo de Moto2 la temporada pasada con el equipo de 'Il Dottore' y pilotará una Ducati Pramac en 2019. En Malasia consiguió terminar los test con el segundo mejor tiempo, una actuación que cautivó a Cristian Gabarrini, jefe técnico de Pramac, quien se atrevió a comentar que "Bagnaia me recuerda a Márquez".
El propio Bagnaia no disimuló y dejó claro desde el principio que "mi objetivo es ser el 'Rookie del año'", y además se atrevió a analizar a sus rivales: "Fabio es muy fuerte, rápido, constante, lo hizo igual de bien que yo en Malasia. Seguramente, en Losail irá fuerte y Yamaha lo está ayudando mucho. Junto con Mir, está entre los favoritos para el título de 'Rookie del año'".
Miguel Oliveira, el portugués más rápido del mundo
El cuarto en discordia, y el olvidado por Bagnaia, es Miguel Oliveira, su rival por el título de Moto2 en 2018. El portugués llega a MotoGP de la mano del Tech3, que abandona Yamaha para montar KTM. El equipo ha tenido una pretemporada con los problemas lógicos que surgen de un proceso de adaptación, pero Oliveira ha podido estar regularmente delante de su compañero, Hafizh Syahrin, e incluso de la KTM oficial de Johann Zarco.
El gran handicap del portugués es la complicada adaptación a la KTM, moto con chasis multitubular y que está siendo un quebradero de cabeza incluso para el experimentado Johann Zarco con la moto oficial. El propio Oliveira explicaba que "hemos probado dos configuraciones completamente diferentes en la búsqueda de conseguir un poco más de estabilidad en la parte trasera y mejorar la tracción en la salida de las curvas".
Oliveira, además de un gran dentista, es ya el mejor piloto portugués de la historia del mundial gracias a sus dos subcampeonatos, uno en Moto3 y otro en Moto2, y ahora será el encargado de comenzar a hacer honrar la bandera portuguesa en MotoGP. En esta primera temporada le tocará hacerlo desde el fondo de la parrilla, pero a sus 24 años y con esta velocidad, es difícil dudar que Oliveira estará pronto dando guerra en la zona noble de MotoGP.
Dos campeonatos del mundo, dos subcampeonatos y 34 victorias de palmarés conjunto para una generación de cuatro pilotos con un talento rabioso, mucha experiencia y una preparación única que promete comenzar a tomar el relevo de las grandes leyendas de MotoGP.