Aprilia tendrá un equipo satélite la próxima temporada. La marca italiana acaba de anunciar lo que ya se venía comentando desde hace semana: que han llegado a un acuerdo con el RNF, el actual equipo satélite de Yamaha, para que sea su estructura asociada a partir de 2023. Razlan Razali pasa a ser socio de Aprilia.
Un acuerdo que, de momento, deja a Yamaha sin equipo satélite para la próxima temporada. Aún queda por ver si con los restos de Suzuki se forma una estructura que pueda cumplir esa misión, o si por el contrario la mítica marca de los diapasones se queda solo con dos motos en pista por primera vez en mucho tiempo.
Yamaha se queda sin equipo satélite para 2023
Este anuncio confirma la apuesta decidida de Aprilia por MotoGP. Ayer mismo anunciaron la renovación de Aleix Espargaró y Maverick Viñales por dos temporadas más, hasta 2024, y ahora doblan el número de motos que tendrán en pista quedándose con el RNF Racing. Y todo esto mientras lideran el mundial.
Además, también se ha confirmado que WithU, el principal patrocinador de la estructura, seguirá con el RNF Racing las dos próximas temporadas. Veremos si cambiando Yamaha por Aprilia este equipo malasio puede cambiar la pésima dinámica en la que lleva metido en las dos últimas temporadas.
Ahora otra gran incógnita es la de los pilotos. Suenan varios nombres para ir a parar al equipo satélite de Aprilia, entre ellos el de Álex Rins, que ya estaba siendo vinculado últimamente a la casa de Noale. También Raúl Fernández, Marco Bezzecchi o algún joven de Moto2, como Celestino Vietti, son del agrado. El patrocinador ya exigió a un italiano para 2022.
Lo que está claro es que ni Andrea Dovizioso ni Darryn Binder van a seguir y tienen sus días contados en MotoGP. Veremos cómo se da un final de temporada en el que todas las partes saben que se van a separar al final del año. No hace tanto, esta misma estructura con el nombre de Petronas ganó seis carreras y fue subcampeona del mundo.
La otra parte afectada es la de Yamaha. La marca de los diapasones se queda sin equipo satélite, algo inédito en su andadura por MotoGP. Además, teniendo en cuenta que Suzuki está fuera para 2023, dejaría tan solo dos motos con motores cuatro en línea en toda la parrilla de MotoGP. Aunque aún están a tiempo de evitarlo.
Si finalmente es un equipo independiente quien se queda con los restos de Suzuki lo lógico sería que fuese el nuevo satélite de Yamaha, mientras que si acaba entrando una marca nueva, como insinuó la FIM, a Yamaha solo le quedaría la esperanza de que alguna estructura de Ducati se separase antes de tiempo para irse con ellos. ¿Será Valentino Rossi?