Max Biaggi se rompió el brazo en Australia hace poco más de un mes, y en este tiempo no sólo ha conseguido recuperarse (reconozco que esta es una de las cosas que más me sigue alucinando de los pilotos profesionales), sino que se ha metido en la novena plaza en la superpole esta misma tarde. El resultado, en condiciones normales, no sería para tirar cohetes, pero en esta ocasión sí que creo que merece ser comentado.
Max anuncia en su página web que su condición física está lejos de ser boyante en estos momentos, pero el trabajo previo y la capacidad de superar el dolor (recordemos que se lastimó ligamentos, entre otras cosas, y eso duele...) le permitirán intentar sumar la máxima cantidad de puntos en Valencia, un circuito que ya vimos el año pasado que se le da muy bien.
Complicado, sí que es. Pero si ayer fue un día complicado para Max, cuando fue necesario infiltrar para que soportase el dolor, después de un mes sin darle duro, hoy ha sido mucho más positivo aunque con matices. No va a resultarle agradable darlo todo durante las 23 vueltas de cada manga, es consciente, pero le pagan por ello. Veremos si es capaz de aguantar el tipo mañana, sin duda los pilotos tienen sus defectos, como todos, pero a la hora de ser profesionales, sorprenden.
