Los mejores antirrobo del mercado. Siete formas de evitar que te roben la moto
Si a algo tiene miedo un motero es a que le roben a su preciada montura. Nadie está libre de que unos ladrones intenten mangarle la moto, ya sea a plena luz del día en la calle o hasta en el parking cerrado de un juzgado. Nadie es nadie.
Si bien no existen métodos infalibles para proteger a una moto, existen los antirrobos. No hay uno ni dos, sino varias formas y objetos con los que podemos añadir un plus de seguridad a nuestra moto cuando la dejamos aparcada y que pueden hacer que durmamos algo más tranquilos por la noche.
Que te roben la moto es fácil, pero evitarlo todavía más. Burla a los ladrones con alguno de estos antirrobo
Los antirrobos son un método de seguridad disuasorio, pero no implacable
Cualquier ladrón con la herramienta adecuada se podrá llevar tu moto. Es difícil de asimilar, pero una buena radial incluso portátil hará el trabajo sucio y partirá cualquier tipo de metal del antirrobo.
Ahora vamos con la parte positiva: un antirrobo es un método disuasorio brillante. Algunos utilizan alarmas que alertan inmediatamente y otros directamente llevan un tiempo que el ladrón no se puede permitir. Así que sí, son eficaces.
Por eso hoy en Motorpasión Moto vamos a hacer un repaso a todos los antirrobo que hay en el mercado, valorando cuál es más eficaz o el precio en el que se mueven. Desde un simple candado de disco hasta un antirrobo de horquilla, el que es seguramente el más eficaz de todos. Estarán clasificados de menos a más seguros.
Antirrobo de manillar
Son, con toda probabilidad, los más fáciles de romper. Son livianos y fáciles de transportar, y ahí está su pecado. El único elemento de resistencia que tiene es un pasador de bloque de acero (usualmente), y aunque reforzado en carburo de unos pocos milímetros de grosor, es muy sencillo de romper.
Van colocados entre el manillar y el freno delantero de la moto, de tal manera que quien la encienda, le impide la marcha al frenar la moto. Suelen venir con alarma de seguridad, y son muy útiles y baratos para momentos puntuales especialmente en ciudad. Dejarla aparcada, hacer un recado de unos minutos y horas y despreocuparte.
Existe un segundo tipo de antirrobo de manillar que coge el mismo nombre, y que son habituales en los scooter. Estos en concreto van fijados desde el tope del manillar hasta un punto fijo anclado a la moto, impidiendo moverla.
Ambos son fáciles de romper pero disuasivos, por lo que lo mejor es combinar estos antirrobos de manillar con otros.
Antirrobo de disco con alarma
Es probablemente uno de los más utilizados por los motoristas. Son eficientes, algo más difíciles de romper y muy alarmantes. También son ligeros y fáciles de transportar, ¡pero cuidado con arrancar la moto y dejártelo puesto! Además de partir el disco de freno, te caerás al suelo.
Anclados al disco de freno delantero, se fijan y tienen una alarma. Lo más habitual es que utilicen acero cementado para el cierre. Incorporan una alarma de unos 120 dB (dependiendo del model), y más vale que traigan un cordón para que no se te olvide retirarlo cada vez que subas a la moto.
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Pinza/abrazadera de llanta
No es la mejor medida de seguridad pero sí una de las más caras. Las pinzas antirrobo van colocadas en la llanta en forma de pinza. El sistema es idéntico al que se utiliza para inmovilizar los coches, pero adaptado para las motos.
Están fabricadas en acero endurecido y dependiendo del precio, serán más o menos resistentes. No suelen ser baratos, ocupan demasiado espacio y son relativamente sencillas de romper en unos cinco minutos con una sierra.
Cadena cementada
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El acero cementado es una aleación de metal con un tratamiento extra en la superficie. Eso dificulta algo más la labor de quien intente romperla, aunque todo dependerá del grosor de la cadena y de la herramienta utilizada. Es el material más adecuado para proteger la moto, y de lo más difícil de romper.
Este, en combinación con un buen antirrobo de disco con alarma es lo más extendida en el mercado. Cuanto más grosor, más dificultad de romper (y más caros). Es recomendable atarlo a un elemento fijo como una columna o una farola. Lo recomendable es que sea de 10 mm en adelante; 13 mm mejor todavía.
Antirrobo de horquilla en forma de U
Las horquillas en forma de U son más voluminosas ya que tienen una forma fija y no maleable. La estructura metálica se puede atar a otro elemento fijo o bien se puede utilizar para unir la rueda con la horquilla delantera o incluso el basculante con la rueda trasera, impidiendo el movimiento.
Son perfectas para los garajes, ya que es improbable llevarla en una mochila cargada, ya que pesa, y son bastante seguras.
Antirrobo fijo al suelo
Estamos ante uno de los métodos más complicados. No son inexpugnables, pero casi. No hay demasiados en el mercado, y son bastante caros. Si tienes una plaza de parking propia o un garaje, es la mejor opción y una inversión a largo plazo.
Son una especie de armazón o 'búnker' metálicos con candado que va anclado al suelo y que impide desmontarlo fácilmente. Se atornilla al pavimento mediante unos tornillos autorroscantes que no se pueden sacar y romper las varias capas de seguridad que lo conforman llevará al ladrón unos cuantos minutos o incluso horas.
Una vez perdidos, el localizador GPS puede ser tu salvación
Si desafortunadamente el ladrón ha burlado el antirrobo y se ha llevado la moto, tienes una vida extra en el juego de recuperar tu moto, y se llama localizador GPS.
Escondidos en alguna parte de la moto, solo necesitan de una tarjeta SIM (cuestan entre 5 y 10 euros) para funcionar. Tienen una determinada autonomía al incorporar batería, por lo que no son infinitos y habrá que recargarlos cada 'X' tiempo, generalmente cada 1 o 2 meses.
Funcionan a través de una aplicación en tu smartphone, y en todo momento irá rastreando a través de señal 3G, 4G o 5G en dónde se encuentra la moto una vez sustraída.
Otra opción es un Apple AirTag. Solo para aquellos que tengan algún dispositivo de Apple, ya sea iPhone, Mac o iPad, podrán geolocalizar en todo momento dónde se encuentra el pequeño chip con forma de llavero que utiliza al resto de iPhone para ubicarse.
Apple AirTag
Aplícate alguno de estos consejos
Como hemos pincelado a lo largo del texto, lo conveniente no es usar un solo antirrobo, sino dos o más. Cada seguro que le pongas a la moto será un obstáculo para el ladrón que le llevará más tiempo y evitará que le ponga encima la mano a tu moto.
Un buen seguro antirrobo es otra de las medidas más eficaces posibles. Las compañías ofrecen diversas pólizas a las que hay que prestar mucha atención. No es lo mismo que un seguro te ofrezca en su póliza el valor de mercado que el valor venal, y dependiendo de los años que tenga tu moto.
Muchos motoristas tienen la costumbre de guardar la documentación de la moto bajo el sillín, lo cual no es una buena idea. Debería ir siempre contigo, porque si te roban la moto tendrán carta blanca con los papeles de la moto.
Por último, instalar una cámara de seguridad es una gran idea. Puedes encontrarlas por entre 20 y 30 euros, y además de estar alerta e indicarte cuando hay movimiento, todo quedará grabado. Algunas incluso tienen alarma.