Fuel Strada: una impresionante Scrambler con sabor a café solo, negro y dorado
Hoy vamos con la última estrella del Cinturón de Orión de las tres Ducati Scrambler que nos faltaba por desgranar. Por ser la última no es la peor, en absoluto, basta con fijarse mínimamente en las fotos para darte cuenta que la Fuel Strada es una verdadera luz brillante en el firmamento de las preparaciones.
Quizá su mayor virtud es parecer una moto de serie gracias a lo bien integrado del conjunto. Sólo los que sabemos que debajo de esa silueta de café racer se esconde una Scrambler Icon nos podemos imaginar algo, pero para lucir así de sublime han hecho falta muchas horas de trabajo, diseño y conocimientos.
De scrambler moderna a café racer vintage
Viendo las modas que rigen el mercado actual es fácil saber que lo retro vende, basta con ver el bien que está haciendo la Scrambler a las cifras de ventas de Ducati. Además, el profundo calado de la Scrambler en el mercado se está apuntalando con una alta demanda en el mundo de las preparaciones.
Su estrecho y fiable motor bicilíndrico refrigerado por aire tiene unas buenas prestaciones, el chasis es solvente y se acompaña por una parte ciclo que digiere bien casi cualquier floritura. Estos principios junto con una carrocería minimalista y buenos acabados hacen de la Scrambler una excelente base para que los customizadores obren su magia.
Aunque no te gusten las motos retro, si no te hace tilín esta café racer con base de Ducati Scrambler es que no tienes alma
Partiendo de ahí, en Fuel tuvieron una idea clara desde el primer momento: inspirarse en las Ducati 900 SS de los '70 para dar vida a una nueva reinterpretación del concepto. ¡Y vaya reinterpretación que han logrado!
La carrocería es uno de los puntos clave en la transformación, abandonando el concepto de naked clásica para abrazar una nueva imagen café racer compuesta por un pequeño carenado frontal fabricado en Japón, tapas laterales a medida y un colín monoplaza recto y plano réplica de las 900 SS modificado.
El depósito de combustible original se sustituyó por uno de Benelli Mojave al que tuvieron que adaptar una bomba de gasolina externa para alimentar al inalterado propulsor italiano Desmodue.
En cuanto a la decoración, creo que el adjetivo que mejor la define es elegante. Los colores negro y dorado escogidos para rematar la imagen de la Strada se han combinado a la perfección, dejando que el negro sea el protagonista con franjas doradas que recorren la parte inferior de cada pieza. La vista lateral es sublime.
Para meterse aún más en el papel de café racer se sustituyó el manillar ancho y plano de serie por unos semimanillares Rizoma, acompañados por un cuentakilómetros original recolocado en posición central.
La guinda del pastel son las preciosas llantas de radios con aros negros del catálogo de accesorios originales de Ducati Scrambler (además del soporte de matrícula, guardabarros de carbono y manetas) que refuerzan el look retro.
Por último, el escape recibe un silencioso con forma de megáfono, las estriberas originales se han cambiado por unas de Ducati Monster modificadas y a la horquilla invertida frontal se le acortó el recorrido para agachar el morro y mejorar el impacto visual de la Strada.
Y ahora que las conoces a todas, la pregunta es: ¿con cuál de las tres te quedas? Tenemos esta Fuel Strada, la Scram-motard de Russell Motorcycles y la Regolarita de XTR Pepo. Tú eliges, yo no lo tengo nada claro.