No hay encanto parecido al de enfrentar la moto más rápida del mundo a cualquier superdeportivo. Y es que el jugo de exprimir a la Kawasaki H2R contra un coche de altos vuelos es tan sabroso como difícil de reunir a estas dos bestias. Pero la gente de Carwow lo ha vuelto a hacer.
El vídeo se cuenta solo con los tres protagonistas que participan en la hazaña: una Kawasaki H24, la moto de producción más rápida del mundo; un Bugatti Chiron SS, el coche de producción más rápido del mundo y bueno, una Ducati Panigale SP2 que está en inferioridad de condiciones, pero que también dará que hablar.
¿Pueden 310 CV contra los 1.600 CV de un coche? Puede
Juntar a las dos máquinas de producción más rápidas del mundo no es algo que todo el mundo se pueda permitir. Y muchos menos ponerse a hacer carreras con ellas en una pista de aeropuerto abandonada.
El honroso título no es en vano. Primero la Kawasaki H2R, una bestia con motor sobrealimentado de 998 cc y cuatro cilindros que es capaz de rendir hasta 310 CV, y un par motor de 165 Nm. Su récord está en superar los 400 kilómetros por hora, la moto de producción más rápida del mundo no homologada para calle.
Y luego está el Bugatti Chiron SS. También comparte título al alcanzar la velocidad más alta que haya alcanzado un coche de producción: 490,48 kilómetros por hora. No es para menos con sus 1.600 CV y 1.600 Nm de par motor y tracción a las cuatro ruedas; papeleta difícil tiene la Kawasaki.
La tercera invitada está casi testimonialmente porque no es comparable. Aunque la Ducati es una bellísima obra de arte italiana y es el modelo tope de gama para las superdeportivas Ducati, sus cifras no son iguales. Su motor Desmosedici Stradale R de 998 cc entrega 218 CV a 15.500 rpm; claramente juega en una liga inferior, aunque es la más ligera.
Hechos los prolegómenos toca pasar a la acción. La gran pregunta es: ¿quién es más rápido? Pues te diremos que, de buenas a primeras, los 1.600 CV del Chiron no defraudan. Pero luego, cuando el piloto de la moto japonesa le coge el truco al control de tracción en la salida, lo tiene chupado. La Ducati es testimonial.
Sin embargo, y para animar la cosa, hacen otras cuantas tandas dándose ventaja el uno al otro e incluso una prueba donde los tres clavan los frenos repentinamente; y hay un claro ganador. Desde luego que la emoción está garantizada.