La primera carrera del Campeonato del Mundo de Superbikes disputada en el circuito de Misano Adriático fue una carrera extraña. Extraña porque por primera vez en la temporada, Ben Spies no partía desde la pole, sino que lo hacía Jakub Smrz. Segundo, porque la carrera se disputaría bajo el reglamento bandera a bandera, con una pista completamente mojada pero que con el paso de las vuelta se iba a secar.
En la vuelta de formación de parrilla se iba al suelo Troy Corser, y no podría tomar la salida. Con el semáforo en verde, en primero en tomar la delantera era el británico Shane Byrne, demostrando que su paso por el británico le hace tener un buen pilotaje en mojado. Por detrás, Smrz, Checa y Spies. Haga se encontraba muy atrás, con mucha precaución e intentando no irse al suelo y ceder más puntos.
Como en las carreras que hemos visto en MotoGP, el instante elegido para cambiar de moto es lo más importante en estas carreras de estrategia. A excepción de Carlos Checa, los otros tres entran casi en la misma vuelta. Es sorprendente el buen ritmo de Ben Spies, teniendo en cuenta que en EEUU no corren en mojado. Sin embargo no es un espejismo, y así lo demostró el año pasado bajo el aguacero en Daytona.
El último en entrar es Rubén Xaus, que durante unas vueltas lideró la carrera. Pero claro, fue sólo un espejismo, porque en su reincorporación a la pista, se situaba en decimocuarta posición. Ben Spies llevaba la delantera, con un ritmo muy fuerte, que impedía que tanto Byrne como Fabrizio lo llegasen a alcanzar.
Así, el americano se hacía con una buena victoria, seguido de Shane Byrne, Michel Fabrizio y Jakub Smrz. Quinto era Noriyuki Haga, mientras que Checa, con problemas en la segunda moto, perdía las opciones a pódium no pudiendo mejorar la undécima posición. El resto de los españoles, Xaus decimocuarto, Fonsi decimoctavo y David Checa, Lavilla y Salóm cerraban la clasificación.
Vía | WSBK