Las marcas chinas de motos vuelven a hacerlo; y ya no solo hablamos de fusilar, sino que son capaces de actualizar sus propios productos copiados e incluso mejorarlos. Para prueba de ello la Selong/Moxiao, que de ser la hermana menos agraciada de la Ducati Streetfighter V4 ha pasado a ser un calco.
Solo hay que ver cómo era la primera versión, que parecía de juguete, y la segunda versión presentada recientemente. No solo se parece más a la Streetfighter, sino que ha pasado de un bicilíndrico a un tetracilíndro para ser la moto más potente de China, literalmente.
117 CV: la moto más potente de China sería esta Streetfighter barata
Cuando descubrimos por primera vez la Moxiao 650 RR se nos escapó una carcajada. Era una copia descarada de la Ducati Streetfighter V4, pero con un evidente sentido de mal gusto, ya que parecía haber sido diseñada por un niño. Hasta en la foto de presentación la pata de cabra se apoyaba sobre una piedra (aunque eso no ha cambiado mucho, como verás).
Pues ojo porque los chinos parece que han espabilado. Aquella Moxiao 650 RR ya no es lo que era; en la última actualización de la marca ha pasado de ser el patito feo a parecerse demasiado a la Streetfighter V4, la de verdad.
Comparándola con el modelo anterior, sus formas son mucho más agresivas y pulidas, y con detalles que se asemejan demasiado a la moto original. Desde el faro, intermitentes, formas del depósito, quilla, y la forma en general, aunque salvando las distancias, obviamente. Viene hasta con un basculante monobrazo y una extravagante posición del amortiguador basada en el modelo original.
Los más meticulosos se habrán dado cuenta de lo esperpéntico de la foto; los chinos utilizan un martillo para apoyar la pata de cabra de la moto para hacer las fotos. Una opción mucho más viable que utilizar un caballete, por ejemplo.
Un evidente asalto de propiedad intelectual a Ducati, pero los chinos ya no se cortan ni con un cuchillo. Es surrealista que hasta vayan mejorando sus propias copias.
Han crecido en motor y potencia. Lejos queda atrás el bicilíndrico de 471 cc que rendía 44 CV de potencia y que llegaba a 120 km/h a duras penas. Ahora, en cambio, los chinos emplean un cuatro cilindros en línea con 777 metros cúbicos. Y ojo porque ahora es la moto nacional china más potente con 117 CV de potencia.
Para los asiáticos que no se puedan permitir una Ducati Streetfighter por allí, la rebaja de su gemela fusilada se vende por unos 4.500 euros al cambio, lejos de los más de 25.000 que cuesta aquí.