KTM está a punto de ser rescatada del abismo. Según informa la web especializada GPone.com, la marca de motos más vendida de Europa podría evitar la bancarrota gracias a un movimiento clave de su socio indio Bajaj-
Los indios han conseguido un préstamo de 566 millones de euros para cubrir el plan de reestructuración exigido por los acreedores. Y eso puede cambiar las cosas radicalmente.
Cuenta atrás para salvar KTM. Ahora de verdad
La fecha límite es el 23 de mayo a medianoche. Ese es el plazo que el tribunal de Ried im Innkreis ha fijado para que KTM deposite 600 millones de euros en efectivo como parte de la reestructuración aceptada por la mayoría de sus 1.200 acreedores, que reclaman en total unos 2.200 millones. Si no se entrega esa suma, se activará automáticamente el proceso de bancarrota.
Durante semanas, los rumores sobre posibles inversores (desde BlackRock hasta Apollo o Fortress) alimentaron la esperanza. Pero lo que parecía un puzle sin cerrar ha cambiado radicalmente con el movimiento de Bajaj, el socio industrial de KTM desde 2007.
Bajaj toma el control (y la iniciativa)- Según medios indios citados por GP One, Bajaj ha obtenido garantías para el préstamo a través de JPMorgan Chase, DBS Bank de Singapur y Citigroup. La cifra cubriría en solitario la cuota del 30% exigida para el plan de reestructuración, reforzando su peso en la compañía austriaca.
Todo indica que, tras esta maniobra, Bajaj se convertirá en el accionista mayoritario de KTM AG, con un control aún mayor del que ya ejerce como productor y socio estratégico.
Desde 2011, el gigante indio produce todas las KTM hasta 390 cc, así como los modelos Husqvarna de baja cilindrada. La alianza con Stefan Pierer, propietario del grupo Pierer Mobility, ha sido clave para globalizar la marca naranja.
En marzo, Bajaj ya había inyectado 200 millones de euros para retomar temporalmente la producción y reducir un colosal stock de 130.000 motocicletas. Pero el verdadero órdago era asegurar los 600 millones antes de mayo. Y lo han hecho.
¿Qué viene ahora? De confirmarse el ingreso del dinero en los próximos días, Rajiv Bajaj (actual vicepresidente del consejo de supervisión de Pierer Mobility y director general de Bajaj Auto) pasará a tener un rol aún más central en el futuro de KTM.
Su perfil técnico (es ingeniero en sistemas de fabricación) y su experiencia en reorganizar la compañía familiar desde los años 90 podrían marcar un nuevo rumbo para la firma europea.
Y en Austria… Respiran. Una bancarrota de KTM hubiera tenido consecuencias catastróficas para la economía regional, especialmente en el distrito de Braunau, donde decenas de proveedores dependen de la fábrica de Mattighofen.
Conclusión. A falta de la firma final, el rescate está en marcha. Bajaj no solo salva a KTM: también consolida su posición como un titán silencioso de la industria mundial de la moto. La historia que empezó en 2007 como una simple alianza industrial puede convertirse, este mayo, en una adquisición histórica.
Imágenes | KTM