John Fernández
Benelli lo ha vuelto a hacer. La marca que hace apenas unos años se convirtió en la primera gran tesis china con nombre europeo al conquistar el mercado con la TRK 502, hoy prepara un movimiento mucho más ambicioso.
Y no es menor: sumar un cilindro a su trail más vendida, dar un salto técnico y acercarse a la liga de las marcas europeas y japonesas.
El salto de Benelli: un cilindro más, un escalón más
El proyecto tiene nombre y apellido: Benelli TreK. Una moto que revive la denominación de la antigua TreK 1130, pero que en realidad no rescata su motor tricilíndrico, sino que desarrolla desde cero un propulsor completamente nuevo.
Hablamos de un tres cilindros en línea que, según las filtraciones, podría superar los 110 CV de potencia. Es decir, un escalón más respecto a la futura TRK 902 Xplorer (904 cc y unos 100 CV) y una entrada directa al terreno de las maxi-trail de alta cilindrada.
El prototipo cazado en pruebas revela además una de las sorpresas más grandes: no había pedal de cambio. Todo apunta a que Benelli (o mejor dicho, el grupo QJ Motor que la respalda desde hace dos décadas) está probando un sistema de transmisión manual automatizada (AMT), con actuadores eléctricos que eliminan el clásico accionamiento de la palanca. La maneta de embrague podría quedar para las arrancadas, pero el resto sería automático. Una tecnología que, de confirmarse, situaría a Benelli en un terreno que hasta ahora han explorado sobre todo gigantes como Honda con su DCT.
En cuanto al chasis y la parte ciclo, todo indica que se trata de una plataforma completamente nueva: horquilla de largo recorrido, llanta delantera de 19 pulgadas y una estética que todavía es difícil de anticipar, aunque las primeras recreaciones ya imaginan un modelo con aspiraciones premium.
El calendario, sin embargo, nos invita a la cautela. El prototipo aún se ve verde, con soluciones provisionales y una ergonomía sin definir. Lo lógico sería que Benelli presente la TreK en noviembre en el EICMA de Milán, probablemente en forma de concept, y deje la versión de producción para más adelante. ¿2026? Quizá 27.
Lo relevante no es solo que llegue una nueva Benelli tricilíndrica. Es que, con ella, la marca china-italiana muestra que ya no se conforma con pelear en la gama media. El salto a un motor de tres cilindros y la adopción de un cambio automatizado son una declaración de intenciones: Benelli quiere jugar en la misma liga que las europeas y japonesas. Y ese “cilindro extra” puede ser justo la escalera que le faltaba para subir de división.
Imágenes | Benelli
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