Seguro que te has fijado en las parrillas de algunos de los últimos coches de BMW que están saliendo de producción. Son grandes, con forma de riñón y difíciles de no percibir, pero en el fondo tienen una función sumamente importante. Pues ahora BMW Motorrad quiere hacer lo propio, pero en sus motos y con el mismo objetivo: mejorar la refrigeración de la moto.
Por el momento el invento se encuentra en una etapa tempranera, y solo han registrado la patente. Aunque no será el producto final sí que podemos sacar bastante información e intuir por las pistas que nos han dado, que podría llegar para uno de sus futuros modelos: la BMW R 1300 GS.
La patente se muestra sobre la esperada R 1300 GS
La refrigeración y aerodinámica en las motos cobra la misma importancia que en los coches, es algo que vemos constantemente en MotoGP y Superbikes. Por eso BMW ha ido un paso más allá y ha registrado en la oficina de patentes dos bocetos sobre un nuevo sistema que iría equipado en sus motos de alta cilindrada según la información de Cycle World.
Es un trabajo relativamente sencillo teniendo en cuenta la experiencia que tienen en los coches. En ellos esas enormes parrillas ("riñones") tiene dos funciones: mejorar la refrigeración del motor y ayudar a la aerodinámica. Con esas rejillas se frena la resistencia del aire y el sistema de refrigeración abre o cierra las rejillas a medida que demanda mayor o menor temperatura.
En las patentes el modelo utilizado es una R de la gama GS, con el típico motor bóxer de refrigeración líquida que emplea la marca. Bien podría tratarse de la rumoreada BMW R 1300 GS. En ella se instala un sistema similar al de los coches, con unas guías que se irán abriendo o cerrando sucesivamente en función de las condiciones de la moto
La explicación que acompaña al sistema es el siguiente: "La disposición de refrigeración suele diseñarse sobre la base del mayor requisito de potencia esperado, que puede ocurrir en el caso de condiciones de funcionamiento extremas. En situaciones cotidianas con menores requisitos de rendimiento para la disposición de refrigeración, esto es correspondientemente sobredimensionado.
Desde BMW señalan que los radiadores de las motos suelen ir colocados en el frontal, donde reciben todo el aire. Sin embargo, eso crea un efecto contrario: el obstáculo aerodinámico, por lo que con este sistema el flujo de aire no atravesaría el radiador de manera continua, sino cuando la mecánica lo requiera.
Si bien todas las motos vienen con su termostato, no reduce la resistencia aerodinámica. Por eso han diseñado la rejilla que se abre y cierra, lo que han llamado sistema adaptativo de refrigeración. La rejilla adaptativa está formada por un sistema de guías similares a una persiana conectada a un servo que las controla dependiendo de lo que vaya pidiendo el sistema de refrigeración. En condiciones más extremas, se abrirá para permitir un mayor flujo de aire.
Aunque no es más que una patente, que el modelo que utilicen sea una R GS nos indica que podría llegar instalado en la nueva R 1300 GS que se espera que llegue a finales de este 2023.