Cuando parece que en el mundo de las motos lo habíamos visto todo, nos faltaba por ser testigos de una Suzuki Hayabusa con sidecar y ruedas de coche. Y no es que se trate de una pieza de museo ni ningún prototipo, sino que existe, está en pleno funcionamiento y encima, la venden.
Al halcón milenario japonés le ha salido un pequeño hermano para hacer los viajes más cómodos en pareja con toda la potencia de la Hayabusa: 175 CV de puro nervio para surcar las carreteras lo más cómodamente posible montados sobre las ruedas de un coche.
Ha pasado por todos los mantenimientos y su precio en subasta ya va por los 2.000 euros
Es la última joya que ha sacado Iconic Motorbikes de un container. La casa de subastas americanas compró 39 motos japonesas importadas. Entre ellas había todo tipo de joyas, como una Bimota YB9 SR, una Yamaha FZR750RT réplica de Eddie Lawson y muchas NSR250R, entre otras... Y al final del todo, una Hayabusa reconvertida en sidecar que es una auténtica pasada.
Está en perfecto estado de conservación y ha pasado por todos los mantenimientos para lucir como nueva a pesar de tener 23 años. En concreto el modelo es la GSX-1300R Hayabusa fabricada en el año 2000.
Pura potencia de serie, tal y como se ha mantenido. El halcón peregrino equipa el motor que un día fue el más rápido del mundo: el tetracilíndrico en línea que desarrollaba 175 CV a 9.800 rpm y un par motor de 138 Nm a 7.000 rpm.
Nada más salir de la fábrica le pusieron un sidecar fabricado por el popular preparador EML. "Óptimo diseño para una combinación con motos deportivas", decían en su día. Mide más de 2 metros, cuenta con pinza de dos pistones con disco de 200 mm, suspensión HCAD, amortiguador regulable y unas ruedas de 14 pulgadas de coche (algo habitual en este tipo de máquinas).
La moto cuenta con 34,657 km en el marcador en el momento de la venta, y está en perfecto estado de funcionamiento. Los chicos de Iconic Motorbikes lo han llevado a un dar paseo y esta "obra de arte", dicen, funciona perfectamente: "Tiene ruedas de coche, se pone a 140 km/h. Es muy divertido y no me esperaba que fuese tan rápido", dicen.
La horquilla y suspensión delanteras de la Hayabusa han sido inutilizadas. En cambio, del sidecar sale un brazo de dirección que es quien dirige la acción. El centro de gravedad se desplaza hacia los laterales, nada que ver con la técnica de una moto habitual; tampoco se inclinan en las curvas, sino que se mantienen en una posición fija.
¿Por cuánto se vende? A esta joya aún le quedan unos días en subasta, que puedes seguir en este enlace. Por el momento la puja ganadora es de 2,200 dólares, aproximadamente unos 2,000 euros. Un competitivo precio teniendo en cuenta que solo el sidecar vale eso, sin tener en cuenta el precio individual de la Hayabusa.