Probamos la Yamaha D'elight 125: un sencillo scooter sin carnet que convence por practicidad, consumo y precio
Después de haber probado el Yamaha NMAX 125 y sin salir de la ciudad de Sevilla, la firma japonesa nos tenía preparada una segunda toma de contacto dentro del mismo evento. En esta ocasión era otro scooter de 125 cc, pero en lugar de la categoría Sport Scooter, enrolado dentro de la Urban Mobility: el Yamaha D'elight 125.
Con una propuesta aún más urbana, todavía más accesible y de un carácter práctico dominante, el D'elight 125 también se ha pasado a la normativa Euro5, y lo hace incluyendo algunas mejoras sustanciales para convertirse en una opción sin carnet muy interesante para todos los bolsillos.
Yamaha D'elight 125: formato práctico
Pequeño, asequible y manejable. Así es el pequeño Yamaha D'elight 125 que ya conocíamos, aunque ahora ha cambiado. Cambia por fuera y por dentro para completar el catálogo de Yamaha en un segmento que está más que competido y donde la competencia es feroz.
Quizá ya no queden muchos scooter de 125 cc con suelo plano, pero los que hay tienen que enfrentarse a pesos pesados como el Honda SH 125i Scoopy o el Kymco Agility City 125. Entre ellos acaparan prácticamente todo el pastel, dejando al resto de modelos como este D'elight 125 una porción muy escueta.
Las cifras de ventas del D'elight 125 sorprenden: sólo se vendieron 336 unidades en 2020 siendo un año complicado por la pandemia, pero en 2018 la cifra tampoco sube demasiado, quedándose en 647 unidades. Pero no por ello en Yamaha se han rendido. Al contrario. Han renovado a este pequeño scooter urbanita y hay que reconocer que las cifras de ventas no le hacen justicia como producto.
Por fuera el Yamaha D'elight 125 es un scooter muy clásico. Han seguido con la incombustible receta de juntar un chasis contenido, gran faro delantero, suelo plano y asiento pequeño/mediano para crear un scooter que sea sobre todo manejable. Está destinado a aquellos conductores de coches que quieren o necesitan una moto pequeña pero resolutiva para moverse por ciudad. Una moto que además no imponga lo más mínimo.
De ahí también su aspecto amable, con unos rasgos en los que destaca el gran faro delantero con tecnología LED colocado en el manillar, un generoso escudo que integra los intermitentes dentro de sendos cortes cromados y una parte trasera compacta con un generoso asa que nos sirve para agarrarla con solidez y moverla en parado.
Con respecto al modelo saliente el diseño se ha modernizado con unas líneas más afiladas, y también se incluye un cuadro de mandos revisado, de aspecto clásico, que combina un gran dial analógico con una pequeña pantalla digital donde tenemos la información justa: nivel de combustible, reloj horario y cuentakilómetros parcial/total.
Hablando del puesto de conducción, casi nos hemos subido sin darnos cuenta. Es lo que tiene la maravilla de los suelos planos. Ya casi ni nos acordamos de modelos así, en los que no tienes que levantar la pierna para subirte al asiento. Cuando lo hacemos ahora la sensación es una mezcla entre rareza y satisfacción.
Sentados a los mandos del Yamaha D'elight 125 no tenemos mucho espacio, pero todo está donde tiene que estar. Con una estatura de 170 cm quedamos encajados en este scooter. Llevamos los pies contra el límite que pone el escudo delantero y el culo hasta la zona más retrasada. Las manos nos quedan bajas y bastante juntas. Es una posición natural y cómoda, aunque podría ser algo más espaciosa.
Facilidad, practicidad, ciudad
Dado su carácter más asequible Yamaha no ha incluido en este modelo como sí ha hecho en el NMAX 125 el arranque sin llave, así que la sacamos del bolsillo, giramos el contacto y pulsamos el botón de arranque para que el pequeño motor cobre vida.
Tampoco es el mismo motor que en el NMAX 125. Son similares pero no iguales. Una vez arrancado la rumorosidad es muy, muy baja y apenas emite vibraciones. Al menos no mientras no pulsemos la maneta derecha en parado, cuando el motor sí se dejará sentir levemente cuando accionamos el freno trasero. Algo típico en los scooter.
A nivel interno, la adaptación a la normativa Euro5 ha implicado más cambios de los que podría parecer. El motor de la Yamaha D'elight 125 recibe un nuevo pistón, una nueva culata y un nuevo cigüeñal, además de recibir un tratamiento DiASil en las paredes del cilindro para modificar la fricción.
En cifras, este bloque produce 8,4 CV y 9,8 Nm de par motor que transferidos al suelo nos dejan con una potencia contenida pero suficiente para desplazamientos de índole urbana. Dado que no sea un modelo que busque las prestaciones puras no podemos pedirle mucho más, y la verdad es que gracias a su ligereza no se desenvuelve mal: pesa sólo 101 kg en orden de marcha.
Esta ligereza se siente desde el primer segundo que nos ponemos a sus mandos porque es uno de esos scooter que te dejan hacer lo que te dé la gana. Puedes moverte entre el tráfico para colocarte en las zonas de preferencia para motos en los semáforos, callejear y aparcarla en cualquier sitio porque a pulso se mueve con una facilidad pasmosa.
Aparte de haber mantenido una agilidad encomiable, la D'elight 125 busca ser una moto extremadamente ahorradora. Si bien las características del motor Blue Core que mencionábamos antes estaban encaminadas a acotar el consumo y las emisiones, hay otra novedad interesante.
Este modelo también abraza el sistema de Start&Stop de la marca, capaz de detener el propulsor cuando circulamospor debajo de 3 km/h, el motor está a menos de 2.000 rpm y el acelerador está totalmente cerrado. Si se dan estas condiciones al llegar a un semáforo, por ejemplo, el motor se apaga.
Se puede conectar o desconectar desde el botón de la piña derecha, pero su funcionamiento es inteligente y no se activará si el motor está frío (por debajo de 70ºC), el voltaje de la batería es insuficiente o si no se han superado los 10 km/h desde el arranque previo.
La verdad es que el sistema funciona muy bien, es apenas imperceptible en el momento del arranque y responde con una rapidez extrema arrancando cuando volvemos a acelerar. Además, el consumo refleja lo acertada de esta medida con una cifra homologada de 1,8 litros a los 100 km, o lo que es lo mismo, 55,6 km por litro o 306 km gastando su depósito de 5,5 litros (según ciclo WMTC).
En lo referente a chasis, el bastidor de tubo de acero de la D'elight 125 es sencillo pero efectivo. Da impresión de solidez y tiene una estabilidad aceptable, sólo condicionada por su propia morfología de ruedas pequeñas (12 y 10 pulgadas) y distancia entre ejes de tan solo 1.275 mm.
Este chasis se une a una pareja de suspensiones convencionales con una horquilla telescópica delantera con 84 mm de recorrido y una pareja de amortiguadores con 68 mm de recorrido. Ambos cumplen con su función aunque no destacan por ser especialmente progresivos. Son tirando a secos y se nota en zonas adoquinadas.
El apartado de frenos también es sencillito, con un disco delantero de 180 mm y un tambor trasero. Una pareja de frenos que se relacionan a través de un sistema de frenada combinada que tiene un tacto bastante efectivo pero un poco raro. Soy de los que usan las dos manos para frenar en scooter y la actuación de la frenada combinada se me hace rara.
Yamaha D'elight 125: asequible y resolutiva
En términos prácticos este Yamaha D'elight 125 es muy práctico. Principalmente es práctico por sus capacidades dinámicas a la hora de moverse con total fluidez, pero también porque bajo su asiento encierra un hueco para 36 litros que nos permite guardar un casco integral y más cosas en el espacio restante.
Los guiños a la practicidad incluyen la apertura del asiento y del depósito mediante botones junto a la llave de contacto, la boca del depósito muy a mano en el lado izquierdo del escudo y un gancho para cargar bolsas.
En la parte trasera se puede colocar un baúl de hasta 39 litros, pero echamos en falta quizá un poco más de espacio para el pasajero. Aunque también es cierto que no es un modelo que se vaya a utilizar demasiado a dúo.
El precio del Yamaha D'elight 125 es de 2.749 euros para un modelo que viene bastante completo, con un rendimiento razonable y buenos acabados. El Honda SH 125i es más capaz, mejor acabado y con un rendimiento superior, pero también es mucho más caro con 3.800 euros. El Kymco Agility City 125 en cambio se queda en 2.199 euros.
Yamaha D'elight 125 2021 - Valoración
6.3
A favor
- Agilidad total
- Accesibilidad para todos los públicos
- Buena capacidad de carga
- Suelo plano
En contra
- Poco espacio para los pies
- Estabilidad mejorable
- Tacto de los frenos
Yamaha D'elight 125 2021 - Ficha técnica
| Motor | ||
|---|---|---|
| Tipo | Monocilíndrico de cuatro tiempos, refrigerado por agua, SOHC | |
| Cilindrada | 125 cc | |
| Diámetro x carrera | 52,4 x 57,9 mm | |
| Relación de compresión | 10,2:1 | |
| Potencia | 8,4 CV a 7.000 rpm | |
| Par motor | 9,8 Nm a 6.000 rpm | |
| Inyección | Inyección electrónica | |
| Caja de cambios | Variador continuo | |
| Chasis | ||
| Tipo | Tubular de acero | |
| Suspensión delantera | Horquilla telescópica, 81 mm de recorrido | |
| Suspensión trasera | Basculante oscilante con doble amortiguador, 68 mm de recorrido | |
| Rueda delantera | 90/90-12 | |
| Rueda trasera | 100/90-10 | |
| Freno delantero | Disco de 180 mm con frenada combinada | |
| Freno trasero | Tambor con frenada combinada | |
| Dimensiones y pesos | ||
| Peso en orden de marcha | 101 kg | |
| Altura del asiento | 800 mm | |
| Distancia entre ejes | 1.275 mm | |
| Ángulo de lanzamiento | N/D | |
| Avance de dirección | N/D | |
| Capacidad del depósito de gasolina | 7,1 litros | |
| Número de plazas | 2 | |
| Precio | 2.749 euros |
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