Las prestaciones por desempleo son una magnífica ayuda para aquellos que, por el motivo que sean, no tienen trabajo y no pueden subsistir. Sin embargo, puede que alguien que tiene en el garaje una Harley-Davidson modificada de miles de dólares, una Lamborghini Huracán y relojes como Rolex, quizá no lo necesiten tanto.
Es más bien un juicio que depende de cada autoridad. Y gracias a ello han requisado y detenido a un hombre que pedía prestaciones sociales, y tenía el garaje y los armarios plagados de coches, motos y joyas que valen un auténtico pastizal. Más de medio millón de dólares en concreto.
Creían que pertenecía a una red criminal
Un hombre en Australia estuvo pidiendo beneficios sociales por desempleo desde 2019. Sin embargo, las autoridades se dieron cuenta de que tenía un verdadero botín en forma de coches, motos y joyas guardado en su casa.
Más bien todo desembocó en una investigación policial después de que el Escuadrón contra el Crimen Organizado del Comando Estatal de Delitos de Nueva Gales del Sur y la Comisión contra el Crimen de Nueva Gales del Sur abrieran una investigación sobre el hombre en mayo de este 2024.
Entonces descubrieron que estaba pidiendo las prestaciones, que tenían sospechas de que pertenecía a una red criminal y de que en su garaje tenía un Lamborghini Huracán (216.000 euros), una Harley-Davidson V-Rod altamente modificada (20.000 euros de serie, a lo que habría que sumar la importante lista de modificaciones que tenía la moto) y unos cuantos Rolex (cada uno puede costar desde 20.000 euros).
De hecho, tal era su nivel de capricho que tanto el Lamborghini como la Harley-Davidson estaban pintados del mismo color, el 'Blue Cepheus'. Como podéis adivinar, no es una pintura cualquiera. Solo este color, como extra, cuesta la friolera de 20.000 dólares australianos. Ponérselo a la moto también.
Ahora han acusado al hombre de "posesión deshonesta e interferencia con identificador único" por el Huracán, la V-Rod y las joyas. Evidentemente, las autoridades sospechan que su riqueza viene de redes de crimen organizado.
Entre el coche, la moto y las joyas el valor de los bienes asciende a más de 500.000 dólares en total. Mientras, él se seguía aprovechando de las prestaciones sociales.