La nueva KTM Super Duke es más salvaje que nunca: aún más potencia, diseño radical y alerones a lo MotoGP

30 años no se cumplen todos los días, y la serie Duke lo hace en 2024. Como regalo, los de Mattighofen nos han deleitado con dos hypernaked radicales para el próximo año: las KTM 1390 Super Duke R y KTM 1390 Super Duke R Evo 2024.

A grandes rasgos ya nos podemos hacer una idea de que los austriacos van a lo grande con estas dos motos, pues su motor habla por sí solo: 1.350 cc y una potencia de 190 CV a 10.000 vueltas. Y si antes ya tenían aspecto radical, ahora lo son elevadas al cuadrado. Adiós a la 1290.

KTM 1390 Super Duke R y KTM 1390 Super Duke R Evo: lo nuevo es prácticamente todo

Lo nuevo en esta moto es prácticamente todo. Ya pudimos ver un adelanto de su hermana pequeña, la 990 Duke. Ahora la más radical de la gama sigue sus pasos para 2024, y con un aspecto más radical y afilado si cabe, porque sí, cabe.

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La evolución estética es evidente. La mirada se centra en ese nuevo faro delantero LED, pero que no te desvirtúe del resto, que también es nuevo: desde los alerones en el depósito, cubierta del subchasis, perfil bajo... Se ha vitaminado a base de bien, y parece más musculosa de lo que era.

La propia KTM ha apodado a la moto como "extraterrestre" en su presentación; culpa del nuevo faro. Pesa 700 gramos menos, y distribuye las luces de posición y de circulación diurna en la parte inferior, y se ajustan automáticamente en función de la luz.

Salta a la vista que el depósito de gasolina es más grande ahora, concretamente 1,5 litros (17,5 en total). Junto a él KTM ha rediseñado también la toma de aire y caja del filtro de aire. La autonomía homologada son 300 kilómetros. El peso en orden de marcha es de 212 kilos.

A nivel de chasis la KTM utiliza componentes de última generación de su filial, WP Apex. En la parte frontal encontramos una horquilla telescópica invertida de 48 milímetros con 125 mm de recorrido, con un amortiguador central de 140 mm de recorrido, y colocado verticalmente en el basculante monobrazo de aluminio en la zaga trasera. Ambos ajustables.

La principal diferencia es que la versión Evo equipa un chasis controlado de forma semiactiva (SAT). Dispone de unas válvulas magnéticas controladas electrónicamente que amortiguan de forma variable.

La frenada la confía a unas pinzas monobloque de cuatro pistones, unas Brembo Stylema. Estas van ancladas radialmente al disco doble de 320 mm delante, y con pinzas de doble pistón en el disco de 240 mm detrás.

KTM ha aumentado los diámetros de los cilindros y los pistones de 108 a 110 milímetros, pero manteniendo la misma carrera.

Resultado: ya no cubica 1.301 cc (1290 Super Duke R), sino 1.350 cc. Los nuevos datos dejan una moto más potente: 190 CV a 10.000 vueltas y un par motor de 145 Nm a 8.000 rpm (antes eran 180 CV y 140 Nm). El motor equipa ahora el control de válvula variable.

A nivel de electrónica viene con una pantalla TFT de 5 pulgadas, indicadores de la presión de aire de los neumáticos, conexión con móviles y varios modos de motor. Entre ellos, los “Rain”, “Street” y “Sport” de serie, a los que se pueden añadir el "Performance" (con control de crucero) y "Track".

A modo de extras también se puede pedir control de freno motor y modo anti-wheelie. De serie rematan sistemas de asistencia sensibles al ángulo de inclinación, el control de deslizamiento y el ABS con modo Supermoto.

KTM 1390 Super Duke R y KTM 1390 Super Duke R Evo 2024 - Ficha técnica