Cuatro carreras. Eso es lo que ha hecho falta para que Joan Mir se muestre mentalmente destrozado en su adaptación a la Honda de MotoGP. El campeón de 2020 tuvo un fin de semana desastroso en Jerez, no solo por las dos caídas que sufrió en las dos carreras, sino por las posiciones en las que estaba rodando.
Mir ha dado sus explicaciones después de la carrera de Jerez y nos suenan muy familiares. De hecho, son prácticamente las mismas que dieron en el pasado Pol Espargaró, Álex Márquez o Jorge Lorenzo. La segunda moto del Repsol Honda sigue maldita, y de momento también está truncando la carrera de Mir.
"Las carreras pasan y la moto es la misma"
"Sabía que iba a ser duro, pero no tanto". Es la frase que resume lo que está siendo el paso de Joan Mir por el Repsol Honda. Después de cuatro Grandes Premios suma cinco puntos, todos conseguidos en Portimao. Está en el mundial por detrás de pilotos como Marc Márquez Dani Pedrosa o Michele Pirro, que apenas han corrido.
El fin de semana de Jerez volvió a ser traumático para Mir. Sufrió cuatro caídas, dos de ellas en las carreras. Pero lo peor no es eso, sino las posiciones en las que rodaba: Mir iba decimoséptimo en la carrera al sprint del sábado, incluso detrás de Stefan Bradl, el 'wild card' de Honda, y de nuevo decimoséptimo el domingo.
"Tengo una falta de confianza bestial. A veces cuesta tener motivación. Todo el mundo evoluciona y nosotros seguimos sin mejorar. Las carreras pasan y la moto es la misma", decía Joan Mir al término de la carrera. Declaraciones que son prácticamente calcadas a las del resto de pilotos que han ido pasando por la segunda Honda oficial.
En general no fue la mejor carrera para Honda. Iker Lecuona, el sustituto de Márquez, se quedó fuera de los puntos, Álex Rins también se cayó y Stefan Bradl, el probador, apenas sumó un par de puntos. El mejor fue Takaaki Nakagami, con una discreta novena posición. No hubiese habido ni una Honda en el top diez de no ser por caídas ajenas.
"La moto es la misma de Valencia", dice Mir en referencia al primer test en el que se subió a la Honda. El bicampeón explica que "yo me pruebo y me caigo. Estoy dando el 100%. Hemos salido de situaciones más difíciles, así que ahora toca esto y hay que salir también". Un halo de esperanza en una temporada muy dura.
Mir lleva tres Grandes Premios seguidos sin puntuar y todavía no ha hecho ningún top diez con la Honda. Veremos si a partir de Le Mans puede sacar la cabeza o se hunda en el pozo de la segunda moto del Repsol Honda.