La Yamaha R1 GYTR PRO Edición Limitada 25 Aniversario bien podría ser el arma definitiva de la fábrica de Iwata. Es la nueva y exclusiva deportiva de la marca de los diapasones de la que solo verán la luz 25 unidades en todo el mundo, y que estará hecha a mano pieza por pieza para circuito.
Carrocería de carbono, librea única, piezas de alto rendimiento… Esta Yamaha R1 es lo más cercano que existe a una superbike del mundial y al alcance de los mortales (que tengan una cartera holgada, por supuesto).
159.000 euros para la moto más cercana a la R1 del Mundial de Superbikes
25 años se dicen pronto. Pues son exactamente los que cumple este 2023 la Yamaha R1, una de las superbikes más icónicas de la historia que revolucionó el segmento sport. Corría 1998 cuando los japoneses llevaron a su línea de producción la YZF-R1 por primera vez.
La R1 fue una de las culpables del evolucionado concepto de 'superbike': esto es, básicamente, una moto de cuerpo ligero y una potencia animal (150 CV entonces). La profecía de Young-Machine en 2021 se cumple: los rumores eran ciertos y Yamaha tenía en camino una nueva edición de la R1.
La Yamaha R1 GYTR PRO Edición Limitada 25 Aniversario se convierte en una moto cumpleaños muy especial. Yamaha señala que será fabricada a mano desde el chasis por "mecánicos expertos", y vendrá equipada con piezas de GTTR PRO (Genuine Yamaha Technology Racing).
Fabricada en uno de los 25 talleres GYTR PRO de Yamaha en Europa, la moto ha sido desarrollada por los ingenieros de competición de la YZF-R1 del WorldSBK.
¿Qué la hace diferente? Además de todo lo que hemos dicho, un subchasis trasero de carbono ultrarresistente y ligero diseñado para albergar un depósito de combustible personalizado, una ECU Magneti Marelli, horquilla delantera Öhlins FGR y un amortiguador trasero TTX con precarga neumática.
El basculante con suspensión inferior es un rara avis nacido del programa de carreras de Superbikes. Frenada confiada a Brembo y un carenado recubierto en fibra de carbono.
Para los más exigentes, un módulo GYTR PRO Electronic System (GPES), un paquete de recopilación de datos y control del motor de última generación. También tiene electrónica de alto nivel como anti-wheelie, control de salida, gestión de freno del motor, suministro de combustible ajustable y control de tracción.
Los agraciados que desembolsen los 159.000 euros que cuesta esta bestia (21 % de IVA incluido) pasarán un día en un circuito de carreras con un equipo de técnicos especializados para poner la moto tan a punto como la R1 de Toprak Razgatlioglu.