Gasta el sueldo anual en fundas para la moto esperando que aparezca una nueva debajo (Inocentada)
Un ciudadano de Antromero y de nombre Francisco Jones, o como a él mismo le gusta que le llamen, Paco, se ha dilapidado presuntamente todo su sueldo anual en fundas para cubrir la moto, dejando absolutamente todas las tiendas de recambios y chinos de los alrededores sin existencias. ¿El motivo? Quería cambiar de moto.
Por ello y de forma compulsiva, todas las noches tapaba su Derbi Variant con una funda recién estrenada y esperaba que a la mañana siguiente esta se hubiese convertido en una Aprilia Tuono (es fan de Piaggio). De momento no lo ha conseguido, su ilusión empieza a decaer y la frustración le está pasando factura. Pero hemos preferido que él mismo nos lo contase para poder ponernos en su piel y así intentar comprenderlo.
No lo entiendo, es algo que no acabo de comprender. He visto todas las temporadas de Dynamo, el Mago Pop y Criss Angel y tenía todo clarísmo. Ya conseguí atravesar el Río Piles desde la Feria de Muestras sin mojarme los pies, bajado por la fachada este del Estadio El Molinón con todo el mundo mirándome desde la puerta del Alimerka sin mayores problemas.En casa meto la mano en el acuario para dar de comer a los peces sin abrir la tapa, e incluso no necesito usar la puerta para entrar en mi coche, pero lo del cambio de moto no hay manera. Y no pido saltar desde mi moto hasta la que quiero del tirón, no, me sirve ir poco a poco que si no no podría con los permisos actuales. Eso sí, todas italianas, por favor.
He probado de todo. Desde decir "Abracadabra" a "Klaatu barada nikto", incluso en su versión más comercial "Klaatu... verata... n... Necktie. Nectar. Nickel. Noodle"; pero nada, de momento no lo he conseguido. Pero no pienso dejar de intentarlo.
Veremos en lo que queda esto, pero para mí que el truco para cambiar de moto no era este.
Foto | Erich Ferdinand