Aleix Espargaró ha querido zanjar la polémica. En medio del ruido que sitúa a Jorge Martín con un pie fuera de Aprilia rumbo a Honda, el piloto de Granollers ha roto su silencio desde Silverstone, donde compite como wildcard con HRC. Y lo ha hecho sin medias tintas: "Nunca, nunca, lo juro, le he hablado para que se una a Honda". Ha sido tajante.
La frase no deja espacio para interpretaciones. Espargaró, que fue clave en el fichaje de Martín por Aprilia, recuerda con claridad su papel en aquella operación, pero también que no ha tenido nada que ver ahora con la fábrica japonesa.
Espargaró se defiende
"Si Jorge está en Aprilia, no digo que sea culpa mía o gracias a mí, pero presioné mucho a la dirección de Aprilia, presioné mucho a Jorge para intentar convencerle al máximo. Él tenía que decidir entre dos o tres fabricantes diferentes y yo le presioné bastante para que firmara por Aprilia", empezó diciendo al respecto.
El catalán, que colgó el mono a tiempo completo pero sigue vinculado al paddock con Honda como probador, sigue sintiendo a Aprilia como su casa. Y no esconde su deseo: "Me encantaría ver a Jorge ganar carreras con Aprilia". Pero también entiende el momento complicado que atraviesa el vigente campeón del mundo, aún sacudiéndose las secuelas de la lesión que marcó su inicio de temporada.
"Esto trata sobre los deportistas y sus mentes", reflexiona Aleix. "Nadie en esta sala, ni siquiera yo, puede entender cuánto estuvo sufriendo durante los primeros tres o cuatro meses del año durante la lesión, debido a la frustración. Así que, cuando estás en esta posición, nunca sabes lo que harás, lo que tu cabeza decidirá".
Ocho años le unen a Noale. Ocho temporadas de reconstrucción, sudor y finalmente gloria, que han dejado huella: "Siempre sentí que recibí un trato increíble por parte de la dirección de Aprilia", recuerda. "Tengo un respeto enorme por ese equipo. Siento que tienen el equilibrio perfecto entre competición y ambiente familiar. Estuve muy, muy feliz. Siempre sentí que era el Valentino Rossi para ellos".
El jueves, Aprilia se apresuró a negar cualquier movimiento para liberar anticipadamente a Martín. Y Espargaró, por su parte, cerró el círculo dejando claro que, por encima de todo, está el vínculo personal: "Una vez más, no se trata de mí, no se trata de Aprilia. Se trata de un piloto que ha estado en la cima del mundo y de repente está en el fondo. Así que es difícil entender lo que harías en su posición. Pero decida lo que decida, lo respetaré e intentaré estar cerca de él".
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