Honda VFR 1200 F, le hacemos una revisión estética

Honda VFR 1200 F, le hacemos una revisión estética
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Como ya os he comentado el fin de semana pasado asistí al Salón Sobre 2 Ruedas que se celebró en el pabellón de la Institución Ferial Alicantina. Y entre las muchas motos chinas, algunas Custom y la exposición Rising Sun (Sol Naciente) en una esquina del pabellón de la feria destacaban dos Honda VFR 1200 F, una roja y otra en blanco. La verdad es que esta y la Ducati Multistrada 1200 son las dos novedades de este año que más trabajo nos han dado en Moto22, pero la Ducati todavía no había llegado al concesionario de Alicante, con lo que no puedo hablar con conocimiento tras haberla “manoseado” (las pruebas tardarán un poco más) Pero vamos a ver las impresiones que me produjo la Honda.

Por un lado la moto es espectacular, con un faro que recuerda mucho a los guerreros Cylones de Galáctica y que cuando se encienda seguro que quedará aún más bonito. Siguiendo la línea del carenado te fijas en que este es bastante vistoso, aunque muy liso, se ciñe muy bien a las formas del motor en V que esconde, aunque esta parte coloreada se queda corta como si se tratase de una chaquetilla en plan torero. Justo donde acaba el carenado de color empiezan unos añadidos que hacen el trabajo aerodinámico. Primero en color plata, sobre el que van grabadas las siglas VFR y después en color negro camuflando el chasis y el motor. El motor sobre sale de todo este conjunto en color gris, pero integrándose en la línea del propio carenado.

Honda VFR 1200 F

La vista se te va sin darte cuenta al colín, muy alto y estilizado, y que también combina el negro y el plateado para “aligerar” visualmente todo el conjunto. Esto pasa si miras la moto por el lado de la izquierda, porque si lo haces por el lado derecho lo que más llama la atención es el escape de planta triangular y sección rectangular. Pero como está realizado en lo que parece acero inoxidable no desentona en el conjunto de la moto. Como veis en las fotos las salidas del escape son de formas distintas y esconden compartimentos en su interior, que imagino que serán el catalizador y los espacios necesarios para silenciar el motor. El colín esconde en la parte de abajo la óptica trasera, que también parece sacada del futuro y agrupa todas las luces e intermitentes.

En el lado izquierdo vemos el basculante mono-brazo que esconde en su interior la transmisión por cardán y el grupo cónico trasero. Sobre esta pieza encontramos otro protector de plástico sobre el que va una pegatina que avisa de los diferentes tipos y medidas de neumáticos que puedes calzar en la moto. Una información interesante tanto para el usuario como para la ITV por si eres de los que le gusta jugar a cambiar medidas de neumáticos en tus motos.

Honda VFR 1200 F

La parte delantera tiene mucha presencia en el conjunto general de la moto, presidida por el depósito, que es bastante grande y queda semi-oculto por los laterales del carenado que suben casi hasta el tapón del mismo depósito. Una vez sentado sobre la moto, te queda delante el cuadro de instrumentos, presidido por un cuenta revoluciones con la línea roja situada un poco más allá de las 10.000 rpm y acompañado a ambos lados por unas pantallas digitales multi función. Justo encima del cuenta revoluciones se aprecian unos cuantos testigos que imagino serán los habituales de todas las motos.

Las dos unidades que había en la feria montaban el embrague convencional, con lo que tendremos que esperar a otra ocasión para ver ese lado del manillar desnudo. Las piñas de mandos son bastante convencionales, aunque no desentonan en el conjunto de la moto. Tras pedir permiso al responsable del chiringuito me subí en una de las motos, y la verdad es que yo, que no soy alto (175 cm) llegaba al suelo sin problemas. El asiento no es de espuma al estilo de las motos convencionales ni como las de competición, si no más bien un material intermedio que da una sensación bastante cómoda. Incluso parece que vas encajado en un colín de moto deportiva, lo que para una moto sobre la que vas a estar mucho tiempo seguido rodando no me parece la mejor opción. El asiento del pasajero queda a una altura mayor, pero no lo pude probar.

Honda VFR 1200 F

Sentado sobre el asiento los mandos te quedan bastante a mano, sin necesidad de hacer ningún estiramiento extraño, eso es importante si ya no tienes la flexibilidad de cuando eras un veinteañero. La cúpula queda a una altura razonable y no parece que vaya a desviar el viento sobre tu cara, si no más bien sobre la parte superior del casco. Las piernas quedan ligeramente flexionadas cuando te subes a los reposa-pies, y estos no molestan cuando bajas los pies para apoyarte en el suelo.

La parte que menos me gustó es la unión entre el carenado y el depósito, que deja unas grandes rendijas entre ambos componentes. Rendijas que se podían ampliar simplemente apoyando el dedo sobre ellas, dando una sensación de plástico blando y fino en un producto que no es precisamente barato. Tampoco me gustaron los retrovisores, que son del tipo en los que el espejo va por fuera del plástico y queda sujeto por una ventosa, como si fueran los de un coche. Habrá que ver como se comportan cuando la moto vaya en marcha y el motor esté en su régimen de funcionamiento. La posición no me pareció mala, pero la línea no me gustó nada.

En definitiva la moto pasa la prueba en parado con un 7,5, no le doy más por la sensación de plástico que da, sensación que queda por encima de la calidad de los componentes que monta. Esperemos que en la prueba dinámica muestre mejores actitudes, porque en parado me ha decepcionado como pasa con esas películas que de tanto promocionarlas al final cuando las ves te decepcionan porque no eran para tanto como te habían contado. ¿Soy demasiado exigente con ella o a vosotros os ha dado la misma sensación?

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