El día comenzó nublado y así se quedó hasta el final de la carrera de MotoGP, pero eso no nos ha impedido disfrutar a tope este fin de semana en el circuito Motorland Aragón. Más de 100.000 personas han pasado por las instalaciones entre el viernes, sábado y domingo y a pesar del fresquito que sentimos por el viento, vivimos grandes emociones.
Por lo que hemos comprobado, habéis pasado muchos por el stand de NIVEA FOR MEN para tratar de entrar en el top 5 del Gran Premio y llevarse directamente uno de esos cinco pases dobles para el VIP Village en Valencia. Y por lo que parece han habido incluso nervios en la lucha por alcanzar esa quinta posición, ¡ha sido como un Gran Premio de verdad! Pero hoy íbamos a contar otra cosa, cómo se viven las carreras desde el circuito, y os puedo asegurar que si por alguna razón nunca habéis podido presenciar MotoGP en vivo, no os arrepentiréis de hacerlo.
Asistir al circuito te permite ver de cerca a los pilotos, aunque sea de refilón o con prisas, y también tienes acceso a imágenes que no se ven en al tele. Mecánicos descansando, azafatas paseando, personalidades invitadas... puedes ver de cerca los grandes camiones de los mecánicos, los motorhome de los pilotos y mil cosas más. A veces se ven cosas que te ponen los pelos de punta, como la pobre persona que iba disfrazada de Tigretón con el calor sofocante que hizo.
Vivimos mucha emoción en las tres categorías, en 125cc la emoción de ver como Nico Terol se hacía con una victoria espectacular sobre Johann Zarco, pero con la pena de ver cómo caía al suelo Héctor Faubel en un alarde de valentía. Maverick Viñales nos alegraba el podium con su tercer puesto.
En Moto2, ver a Marc Márquez a escasos metros mientras ataca a sus rivales es un placer. Lo fotografiamos justo cuando adelantaba a Andrea Iannone, imagínate la emoción de verlo en directo y además que eso sirviese para correr como un demonio hacia la séptima victoria de la temporada, recortando aún más puntos a Stefan Bradl.
Para MotoGP nos quedamos más a resguardo, desde nuestra posición pudimos ver la parrilla de salida, cómo los medios y los equipos se vuelvan con MotoGP que, a pesar de tener pocos pilotos en pista, sabemos que son todos unos super pilotos. Pudimos ver a todos ellos, incluso ver cómo Héctor Barberá cambiaba de moto justo debajo nuestro.
Es una sensación diferente. En la tele se ve más la carrera, se ve completa. En el circuito se vive. Por ejemplo, la salida de MotoGP, ese momento con los motores rugiendo, es irrepetible. Se te mete dentro y de ahí no puede salir más. Así que si quieres vivir la experiencia GP en un lugar privilegiado, no dudes en permanecer atento al club porque sortearemos más pases, y también en la web de NIVEA FOR MEN, ¡atentos!
