Ha sido el tema estrella del Gran Premio de las Américas. Los baches del circuito de Austin han puesto en pie de guerra a los pilotos de MotoGP tras unos entrenamientos libres muy complicados y peligrosos. Se ha llegado al punto de que se valoró la posibilidad de boicotear la carrera, pero la sangre no ha llegado al río... de momento.
Aunque finalmente sí ha habido carrera en 2021, los pilotos han dejado una clara amenaza: habrá boicot si no se asfalta de nuevo la pista para 2022. De hecho, han sacado la promesa por parte de Dorna de que no incluirán el Gran Premio en el calendario si sigue teniendo los mismos problemas de baches.
Austin ha prometido a MotoGP arreglar los baches para 2022
Las reuniones durante las jornadas del viernes y el sábado fueron constantes para evitar que hubiese pilotos rebeldes ya en 2021. Dorna ha conseguido sacar de los organizadores la promesa de que se arreglarán los baches de cara a 2022, y a su vez los pilotos han conseguido que Dorna les prometa que, si no es así, no habrá carrera.
El problema estaba entre las curvas 2 y 11, una zona muy amplia de Austin que está completamente bacheada, haciendo que las motos despegasen del suelo incluso en puntos de muy alta velocidad. Un peligro evidente que los promotores del Gran Premio se han comprometido a solucionar para el año que viene.
Pero no les queda demasiado tiempo. En ningún caso el reasfaltado se podrá hacer antes del Gran Premio de Estados Unidos de Fórmula 1, que se disputa el próximo 24 de octubre, y hay que recordar que las motos regresan a Austin en abril, ya que es una de las primeras carreras de la temporada. Irán justos para respetar todos los tiempos.
Los pilotos no dudaron en hacer públicas sus quejas sobre el asfalto. "Es una de las pistas más peligrosas que he corrido", decía Pecco Bagnaia, que incluso estaba dispuesto a sacrificar sus pocas opciones de título si se decidía boicotear la carrera. Una opinión a la que se unía Iker Lecuona: "es el peor circuito en el que ha pilotado".
El más beligerante fue Aleix Espargaró, que además de no tener pelos en la lengua ha pagado con creces los baches de Austin. Se ha caído en cinco ocasiones en todo el Gran Premio, completando su peor fin de semana, y con diferencia, de toda la temporada. "Luego vendrán los lloros y los minutos de silencio. Es una broma estar aquí", sentenciaba.
Y es que eliminar los baches de Austin es una reivindicación ya clásica de los pilotos de MotoGP. "Aquí cada año es peor y peor. Está la cosa muy al límite. No es fácil ni agradable", decía un Marc Márquez que, aún así, luego le quitaba hierro al asunto. Es normal, no correr en Austin para él supone perder 25 puntos seguros.
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